Crecer en los niveles inferiores de la colmena Perseus en el planeta Olympas no es una tarea fácil, así que Asaid Virenus decidio que no se arriesgaría y buscaría una vida mejor. A la edad de seis años huyo del orfanato comunal para adentrarse en los pisos superiores de la colmena. Su talento natural para la mimetización le facilitaron en gran medida el viaje entre los peligrosos caminos del mundo subterraneo hasta llegar a los industriosos pasajes de la ciudad colmena. Se quedó varios años observando las incesantes guerras comerciales entre las diferentes comunidades de fábricas descomunales, y decidió que aunque era un ambiente mucho mejor que el del mundo de pesadilla de los niveles bajos, aún así no era suficiente para ella.

Le tomo un poco más de tres años a Asaid el infiltrarse en la sociedad de los niveles más altos de la colmena, empezo sirviendo como doncella, pero después, en un agresivo intento por mejorar, asesinó a la nieta distante del gobernador y tomo su lugar. A la edad de doce años se encontró viviendo rodeada de los privilegios de la clase gobernante, atendiendo a bailes de gala y bebiendo agua fresca, sin embargo esto tampoco la dejo complacida.

Nunca ha revelado cuales fueron sus siguientes planes, pero su disfraz no le duro mucho tiempo. El Inquisidor Virtuna ,que se encontraba en el planeta investigando otros asuntos, descubrió a Asaid, esta al ver su secreto revelado huyo y logró evitar a las fuerzas del gobernador por varios días antes de que fuera acorralada. Mató a dos hombres antes de ser finalmente sometida. El gobernador estaba deseoso por ejecutarla, sin embargo Virtuna tenía otros planes para ella. Tomó a la niña bajo su custodia y le prometio al gobernador que pagaría por sus crímenes. Cuando dejaron Olympas, Virtuna dejo a Asaid bajo la tutela del Officio Assassinorum para que probaran si era lo suficientemente digna para pertenecer al templo Callidus. Pasó los exámenes físicos fácilmente y su inteligencia era claramente superior a la mayoría de los habitantes del Imperio. Había dudas sobre su lealtad, pero los maestros del templo dictaminaron que años de duro entrenamiento lo resolverían.

Durante su estancia en el templo, Asaid continuo siendo rebelde y egoista, y a la edad de diecisiete parecía que sería asesinada por el entrenamiento o sus compañeras, incapaz de seguir adelante. Sin embargo ya había perfeccionado muchas de las habilidades requeridas por el templo Callidus, e incluso había comenzado a utilizar la droga cambia cuerpos, polimorfina. Aunque había alcanzado todo este progreso en las artes del asesinato, no era consuelo para el maestro líder del templo, que veía los motivos de la joven como dificiles de descifrar y le causaban una gran preocupación.

La vida de Asaid podría haber terminado aquí si no hubiera sido por la aparición del Inquisidor Dahwrin, quien intentaba desarollar un tipo de hiperpolimorfina que pudiera crear un anfitrión mortal para el Emperador encarnado. El inquisidor probó sus teorías en los reclutas del templo, pero no pudo conseguir nada más que fracasos. Asaid se arriesgó y se puso al servicio del inquisidor, ya que era una mejor opción que ser ejecutada debido a su lealtad dudosa. El maestro del templo se vió complacido por la fe que mostraba la joven por lo que dió su consentimiento para que pasara a ser parte de las pruebas del Dahwrin.

Asaid sobrevivió a las sesiones experimentales, su inquebrantable determinación le permitió controlar los efectos secundarios de la hiperpolimorfina, sin embargo, mientras hacia esto planeaba la manera de escapar de este nuevo predicamento. La oportunidad llego en la forma del Tecnosacerdote del inquisidor, el cual ataco con sus fuerzas a los hombres de Dahwrin. Mientras ambas fuerzas luchaban por tener control de la joven para sus propios y oscuros propósitos, Asaid se disfrazó del maestro del templo y de esa forma pudo accesar al Cútter artillado del Inquisidor, se deshizo de la tripulación y pudo escapar del templo rumbo a las estrellas.

Usando los poderes conseguidos debido a la hiperpolimorfina, Asaid tomó la apariencia del Magos Lurd, el tecnosacerdote que se enfrentó al inquisidor, y ella piloteó el cutter hasta la nave del Adeptus Mechanicus y convenció a la tripulación de que sus fuerzas habían sido aplastadas, así como de que una nave de guerra inquisitorial se encontraba en camino para vengarse. Después de que los tecnosacerdotes se pusieron a trabajar para huir antes de que la supuesta nave los interceptara, Asaid se indujo en un coma controlado y se colapsó. Cuando la nave del Mechanicus estaba atracando en la estación naval de Aguilana, la asesina desapareció, no sin antes dejar a varios tecnoadeptos muertos, para después mezclarse entre la multitud de la estación espacial. Desde ahí logro infiltrarse a bordo de una fragata y huir varios años luz de sus captores.

Desde entonces, Asaid ha sobrevivido como una asesina a sueldo, trabajando ocasionalmente para comandantes Imperiales con ambiciones políticas, y sus enemigos, e incluso se ha visto reclutada por alienígenas y cultos subversivos. Los experimentos con la hiperpolimorfina le han dejado una dependencia por ciertos elixirs estabilizantes que consigue mediante ataques ataques a instalaciones del Adeptus Mechanicus que son financiadas por sus actividades mercenarias. Ha sido bajo estas apariciones las que shan puesto tras su estela a su cazador principal Lord Antigonous Balorodin,el unico que ha sido capaz de rastrearla.

El casi tuvo éxito en capturar a la asesina, cuando la acorraló en la desolada instalación de investigación de Bagrin Fex, cerca del núcleo galáctico. El inquisidor dedujo correctamente esa luna árida sería el siguiente objetivo de Asaid, por lo que Balorodin le tendió una trampa reforzado con tecnoadeptos y tropas de choque inquisitoriales. En el último momento, Asaid descubrió la emboscada e intentó escapar. Mató a una docena de enemigos y huyó, dejando a muchos más heridos. Aunque escapo de nuevo de las garras de la Inquisición, no fue capaz de obtener ningún elixir, por lo que solo es cuestión de tiempo antes de que vuelva a atacar o se verá arriesgada a que su cuerpo cambie de forma de manera descontrolada.

La preocupación de Balorodin no es solo por los asesinatos que Asaid ha cometido, sin tambien por la posibilidad de que pueda ser capturada por fuerzas anti-imperiales y que de esa manera puedan aprender muchos de los secretos del Templo Callidus y de la Inquisición. Si el conocimiento de la polimorfina llega a manos enemigas, podrían causar un daño inimaginable, además de que podrían poner al descubierto la localización secreta de que cada base del templo asesino.

La hiperpolimorfina le concede a Asaid habilidades casi sobrehumanas, esto sumado a su entrenamiento y disciplina de hierro. No solo es capaz de imitar a otros a la perfección, incluyendo sus cuerdas vocales y organos internos para que sean identicos a la persona copiada, si no que también puede infiltrarse en lugares inaccesibles para los humanos normales. Por lugares estrechos puede llegar al corazón de las camaras de su enemigo, mientras empuja su cuerpo innatural através de conductos de ventilación y pequeñas ventanas para dar el golpe final a su objetivo.

Sacado de Inquisitor - The Thorians,por Gav Thorpe.Ampliado y corregido por Me