El nacimiento de Gorkamorka comenzó con la muerte de Angelis. Sin aviso previo, la muerte y la destrucción cayeron a plomo en su superficie árida. Su impacto, fue rápido pero brutal, extinguiendo toda forma de vida sobre la faz de la tierra. El clima y la topografía de Angelis fue roto y recreado en una nueva e incluso más áspera imagen. La destrucción no era producto de un cometa errante o un asteroide. El objeto que afectó Angelis era una nave espacial, un pecio gigantesco al servicio de la raza más salvaje y más barbárica de la galaxia: Los Orkos.

La entrada del pecio sobre la superficie del planeta pilló completamente desprevenido a toda forma viviente nativa. El pecio viajó sobre la superficie del planeta hundiendose a velocidad hipersónica. Los desgastados reactores se rompieron, las células de combustible quedaron destrozadas, derramando su contenido corroído y creando una nube radiactiva separandose de la estela del pecio. Sus capas externas quedaron completamente carbonizadas pero debido a la falta de la atmósfera y por el ángulo agudo en el que había caído sobre la superficie del planeta, la mayo parte del pecio sobrevivió intacto.

La gigantesca nave creó una incisión en el planeta que ampliaba casi mil millas crendo una gran cicatriz. Su imparable avance convirtió las rocas en un surco monstruoso. Todavía viajando a enorme velocidad, el pecio dispersó millares de toneladas de piezas sueltas a lo largo de su trayectoria. La onda expansiva creada por el propio pecio lanzó millones de toneladas del desierto al aire, y la energía explosiva del impacto era lo bastante potente como para convertir las rocas próximas en polvo. Una capa de radiación y polvo abrazó por completo el mundo sin asentarse durante diez años.


El pecio espacial no estaba deshabitado y, como muchos otros pecios a la deriva, había desarrollado ya un ecosistema propio. Sus habitantes más notables eran una tribu de Orkos en su manera de participar en una guerra galáctica de la conquista ,o Waaagh, como llaman los orkos a estas migraciones violentas. Que hubiera orkos apenas supone una sorpresa, porque la raza orka es bien conocida por su empledo de pecios como medio de cruzar la galaxia, empleando campos de fuerza para apoyar una atmósfera temporal y teleportadores para transportar del pecio a la superficie de un planeta. Que estos orkos hubieran sido atraidos accidentalmente al mundo de Angelis podía deberse solamente a la mala suerte.

El desplome del pecio mató a casi todos los orkos a bordo, pero algunos sobrevivieron junto con otras criaturas tales como gretchin y garrapatos. Otros sucumbieron probablemente a los incendios y a las nubes radiactivas que escapaban fuera del pecio. Pero los orkos, siendo orkos, de naturaleza resistentes a la radiación como al daño físico, rápidamente pasaron página de estos detalles y fijaron sus intereses en la supervivencia. Por supuesto, todo esto es especulación, los orkos nunca han sentido los mejores historiadores, ni siquiera de sus propias historias y su tradición oral tiende a ser básicamente "quien atizóó a quien y cuanto le atizó" mas que en investigar o documentarse sobre los hechos de la historia. No obstante, queda bastante claro que, con algún detalle menor fue así como ocurrió.


Esta historia no es el lugar para explorar la xenobiología genética de los orkos. Baste decir que los que sobrevivieron a caída de la nave son los padres de todos los orkos que vivan actualmente en Angelis.

Sin embargo, lejos de estas preocupaciones, a los orkos supervivientes se les antojaban otras preguntas. Principalmente "¿Como podremoz volver al Waagh!? ¡Van a empezar la fiezta zin nozotroz!" Fue en ese momento cuando los mekánikoz se fijaron como objetivo reconstruir el pecio (entendiendo por reconstruir hacer que se mueva lo bastante como para salir del planeta y reintegrarse al Waagh!). Se estableció una ciudad-base de operaciones general para montaje del Pecio conocida como Mekaburgo. El nombre no fue casual debido a que en la ciudad de Mekaburgo, la palabra de los mekánikos es la ley (y básicamente los mekánikos se crearon su respeto cuando demostraron que sin ellos no hay nave, y sin nave no hay waagh! que valga).

Los orkos irían recogiendo todo el material posible para los mekánikos para el montaje de la nave. Dada la naturaleza belicosa de los orkos, se establecieron varios grupos, bandas, peñas, etc... los cuales establecían una base propia (en la mayoría de casos, un fuerte desvencijado debido a la construcción de la nave). Tras un tiempo, los mekánikos anunciaron que la nave estaba completada y lista para partir. En la inauguración se congregaron todos los orkos, ansiosos de subirse a ella para unirse al Waagh! y descubrieron que los mekánikos habían realizado una serie de "mejoras", a destacar el aspecto"orkoide". Inmediatamente todos los mekánikos gritaron llenos de satisfacción y orgullo que la nave la habían diseñado así para que sus dioses les llevaran a la batalla.


El problema surgió cuando algunos empezaron a preguntar que dios era, Gorko o Morko. Nadie se puso de acuerdo, ni siquiera entre los mekánikos. Del revuelo a la batalla sólo hizo falta esperar unos segundos. La nave quedó destrozada y saqueada y las bandas de orkos quedaron divididas en dos gigantescos grupos, los gorkistas (astutamente brutales) y los morkistas (brutalmente astutos). Los mekánikos supervivientes cuando la cosa quedó mas calmada decidieron reconstruir la nave PERO antes de nada, decidieron llamarla gorkamorka para que no hubiera otra lucha.

Desgraciadamente para los mekánikos, la mayoría de ellos ignoran el "sagrado deber" que es la raparación de la nave y prefieren hacer trabajos para las bandas de pandilleros orkos, tales como mejoras en las armas o tuneamiento de vehículos.

En general, la sociedad orka se encuentra satisfecha. No saben cuando acabarán las reparaciones de gorkamorka, pero eso es algo secundario. Siempre que hayan morkistas a los que darles una paliza (o viceversa) el waagh podrá esperarles un poco más...

Gracias a Anzion de la Colmena